La ministra de Sanidad, Mónica García, anuncia que si las CCAA no entregan la información i en el plazo de un mes, el Ministerio de Sanidad llevará el caso a los tribunales y presentará un recurso contencioso-administrativo. Leer La ministra de Sanidad, Mónica García, anuncia que si las CCAA no entregan la información i en el plazo de un mes, el Ministerio de Sanidad llevará el caso a los tribunales y presentará un recurso contencioso-administrativo. Leer
Desde el Consejo de Ministros, en la rueda de prensa posterior, Mónica García, ministra de Sanidad, ha anunciado el requerimiento formal a las comunidades autónomas gobernadas por el Partido Popular para que envíen, a la mayor brevedad, los indicadores disponibles de los programas de cribado de cáncer de mama, colon y cérvix.
García ha resaltado que el resto de las CCAA o las han enviado o están ello y lo harán en breve. «La ley se cumple», ha dejado claro la ministra. Con el requerimiento se pone en marcha un plazo para la petición por la vía administrativa. Si los datos no se remiten en el plazo de un mes, el Ministerio de Sanidad llevará el caso a los tribunales y presentará un recurso contencioso-administrativo, ha adelantado.
La solicitud se fundamenta en el marco normativo vigente y responde a la necesidad de disponer de datos homogéneos y actualizados que permitan evaluar de forma efectiva dichos programas en el conjunto del territorio nacional.
Sanidad ha subrayado que «ahora mismo están incumpliendo la Ley General de Sanidad, la Ley de Cohesión y Calidad del Sistema Nacional de Salud y la Ley General de Salud Pública, que obligan a las comunidades a cooperar y compartir la información necesaria para proteger la salud de la población».
«Las mamografías son sagradas, la salud de las mujeres es sagrada y la sanidad pública también lo es. Ningún gobierno ni partido está por encima de ellas», ha añadido García, remarcando que las CCAA aludidas «deberían tomar ejemplo de Mazón: la mentira, la desidia y la negligencias no son buenas consejeras cuando estamos hablando de la salud de la gente y de muertes evitables».
«Esta opacidad solo puede deberse a dos cosas o las dos a la vez: o bien a están encubriendo al señor Moreno Bonilla, o bien están tapando su propia negligencia», ha subrayado.
El requerimiento se realiza al amparo del artículo 44 de la Ley 29/1998, regulador de la Jurisdicción Contencioso-Administrativa, como paso previo ante posibles incumplimientos en el suministro de información esencial para la vigilancia en salud pública.
El Ministerio de Sanidad reitera la solicitud realizada previamente por el secretario de Estado de Sanidad. En este requerimiento, se insiste en la remisión de los indicadores establecidos en el Documento de consenso del sistema de información del programa poblacional de cribado de cáncer del SNS.
Sanidad deja margen a las CCAA. En caso de no disponer aún de todos los indicadores, se solicita que se remita, al menos, la información disponible hasta la fecha, o bien aquellos indicadores que se emplean actualmente en la evaluación de los programas autonómicos de cribado de cáncer de mama, colorrectal y de cérvix. Algunas comunidades autónomas ya han enviado esta información o han comunicado que están trabajando para su envío.
El Documento de consenso del sistema de información del programa poblacional de cribado de cáncer del SNS, aprobado por unanimidad el pasado mes de abril por la Ponencia de Cribado Poblacional y la Comisión de Salud Pública del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, establece los objetivos, indicadores y criterios técnicos necesarios para la evaluación de los programas de cribado.
Desde Sanidad, se expone que la Dirección General de Salud Pública y Equidad en Salud, a través de la Subdirección General de Prevención, Promoción y Equidad en Salud, coordina la implementación del documento junto a las administraciones autonómicas. Dada la reciente detección de incidencias relevantes en el programa de cribado de cáncer de mama de Andalucía, se considera urgente disponer de los datos actualizados correspondientes a los últimos cinco años.
Las leyes que rigen el Sistema Nacional de Salud —Ley 14/1986, Ley 16/2003 y Ley 33/2011— atribuyen al Ministerio de Sanidad competencias en materia de coordinación general, evaluación y vigilancia en salud pública. Entre ellas, se encuentra la responsabilidad de garantizar que los sistemas de información sean homogéneos, oportunos y útiles para la toma de decisiones, tanto a nivel nacional como internacional.
La Ley General de Salud Pública establece, además, que las comunidades autónomas deben asegurar el cumplimiento de los requisitos de vigilancia y proporcionar la información solicitada por las autoridades sanitarias, con la desagregación y periodicidad necesarias.
Sanidad ya manifestó a las CCAA su intención de monitorizar los programas de cribado de cáncer de mama, colon y cérvix a nivel autonómico. García se lo transmitió por primera vez en el Consejo Interterritorial (telemático) que se celebró hace casi un mes (el pasado 8 de octubre). Entonces, pidió que enviaran al ministerio información sobre los sistemas de prevención oncológicos.
La petición llegaba tras la grave crisis del cribado de cáncer de mama en Andalucía donde alrededor de 2.000 mujeres no han sido informadas de su diagnóstico siguiendo un protocolo establecido en 2012, cuando la consejera de Sanidad de la autonomía era María Jesús Montero, hoy vicepresidenta primera del Gobierno central.
Esta solicitud nunca fue atendida por las CCAA. De hecho, dos semanas más tarde, el pasado 24 de octubre, las 12 autonomías populares se declararon en rebeldía en el pleno sanitario que tuvo lugar en Zaragoza. Los consejeros de las CCAA del PP plantaron a Sanidad y al resto de regiones en el Consejo Interterritorial.
Fue entonces, cuando la ministra de Sanidad dejó claro que la situación no se iba a quedar así. Anunció que iba a «estudiar todas las vías legales» para que los consejeros del Partido Popular aportasen las respuestas que se les requieren. «Pedir información nunca puede ser un insulto. Los ciudadanos quieren saber si su programa de cribado del cáncer de mama está funcionando, pero ellos han optado por defender a Moreno Bonilla y a Ayuso, que es la que inició esta especie de guerra sin tregua contra la transparencia y contra la confianza de las pacientes», argumentó la ministra hace dos semanas.
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