Un total de 84 departamentos en Francia han activado la «alerta naranja», al igual que varias comunidades autónomas en España, dos tercios de superficie de Portugal y al menos una veintena de ciudades en Italia, de Milán a Palermo, mientras Grecia ha decretado el estado de emergencia en la isla de Quíos por los incendios Leer Un total de 84 departamentos en Francia han activado la «alerta naranja», al igual que varias comunidades autónomas en España, dos tercios de superficie de Portugal y al menos una veintena de ciudades en Italia, de Milán a Palermo, mientras Grecia ha decretado el estado de emergencia en la isla de Quíos por los incendios Leer
La primera ola de calor del verano, con temperaturas superiores a los 42 grados, ha disparado las alertas en el sur de Europa. Un total de 84 departamentos en Francia han activado la «alerta naranja», al igual que varias comunidades autónomas en España, dos tercios de superficie de Portugal y al menos una veintena de ciudades en Italia, de Milán a Palermo, mientras Grecia ha decretado el estado de emergencia en la isla de Quíos por los incendios.
La situación se prolongará previsiblemente hasta el miércoles por el efecto del anticiclón de origen africano anclado en el sur del continente, con la acumulación de aire caliente empujado hacia abajo por la alta presión atmosférica (un fenómeno conocido como «domo de calor» y cada vez más habitual en Europa).
En España, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha advertido que «la transición de junio a julio tendrá lugar con temperaturas muy altas, tanto de día como de noche», con máximas de 42 a 45 grados y con mínimas nocturnas de 25 a 27 en ciudades como Sevilla y Cádiz. En El Granado, en Huelva, se ha llegado a registrar en los últimos días una temperatura de 46 grados, que podría ser la máxima histórica en junio en nuestro país si se confirma.
Francia está experimentando por su parte unas temperaturas entre 10 y 15 grados por encima de la media estacional, con el 90% del territorio bajo los efectos de la ola de calor y ciudades como Orléans, Niza y Marsella ofreciendo acceso gratis a museos refrigerados o pidiendo a los ciudadanos que se refugien en los parques. En París, la tormenta más virulenta en décadas causó esta semana dos muertos y provocó grandes daños materiales.
El portal La Chaine Météo pronosticó entre tanto que el lunes puede ser el día en que se superen los récords de temperaturas en varios puntos del país. El diario Le Figaro publicaba esta misma semana las proyecciones del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (GIEC), que advertía que algunas zonas de Francia pueden experimentar hasta 100 noches «tropicales» al año en un escenario de aumento global de las temperaturas de 2 °C de aquí al 2050.
En Lisboa, los termómetros alcanzaron durante el fin de semana los 42 grados. En Italia, las máximas frisando los 40 grados se registraron en Nápoles y Parlermo, con la ola de calor extendiéndose hasta Venecia y como telón de fondo a la boda de Jeff Bezos y Lauren Sánchez. En Grecia, los incendios obligaron a evacuar amplias zonas en los alrededores de Atenas y a cortar la carretera entre la capital y el cabo de Sunión, donde se encuentra el Templo de Poseidón, una de las principales atracciones turísticas del país.
Según datos de la Organización Meteorológica Mundial (OMC) y del Servicio de Cambio Climático Copernicus, Europa se está calentando a un ritmo que duplica la media global del planeta. El 2024 fue el segundo año más cálido jamás registrado en el continente, con temperaturas 1,2 grados más altas que la medida del período entre 1991-2020 y casi 2,6 grados por encima de la era preindustrial. El mes de marzo del 2025 se registró otro récord estacional en el continente.
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