La última vez que Marta Jiménez estuvo en El Hormiguero fue hace menos de un mes. Aquella noche fue arrastrada por un quad sobre 60 metros de piscinas de agua. Este domingo la mujer adrenalina de El Hormiguero murió cuando practicaba un salto base con paracaídas en la zona montañosa de Punta Calva Leer La última vez que Marta Jiménez estuvo en El Hormiguero fue hace menos de un mes. Aquella noche fue arrastrada por un quad sobre 60 metros de piscinas de agua. Este domingo la mujer adrenalina de El Hormiguero murió cuando practicaba un salto base con paracaídas en la zona montañosa de Punta Calva Leer
A Marta Jiménez la conocía todo el mundo como la mujer adrenalina de El Hormiguero. Era la culpable de que en cada programa en que participaba a Pablo Motos, al invitado, a Marron y a los espectadores se nos pusiera el corazón en vilo. Se la jugaba haciendo posible lo imposible: saltos base de 60 metros en el exterior del plató de El Hormiguero, wake arrastrada por un quad sobre 60 metros de piscinas de agua, lanzarse como un tirachinas y explotar un globo a 40 metros del suelo… Este domingo Marta Jiménez fallecía cuando practicaba el salto base con paracaídas en la zona montañosa de Punta Calva, en el término municipal pirenaico de Plan (Huesca).
Según informó la Dirección General de la Guardia Civil, la alerta llegó sobre las 10.30 horas de este domingo a través de una llamada hecha para avisar de que una deportista, vecina de Huesca, había sufrido un accidente al saltar con paracaídas desde una cresta de montaña. Tras sobrevolar la zona en el helicóptero, los especialistas del equipo de montaña de la Guardia Civil localizaron a la mujer y verificaron que presentaba lesiones incompatibles con la vida, por lo que procedieron a trasladarla en la aeronave a Boltaña y desde ahí al Instituto de Medicina Legal de Huesca.
«Cuando entras en este mundo, ya sabes lo que pasa, ya has oído que hay muertes, ya has oído que hay gente que falta y has oído que hay accidentes», aseguró hace un tiempo en una entrevista en El Relevo consciente del riesgo que suponía su pasión. «Puedes morir haciendo un montón de cosas en la vida; entonces no lo vemos como que sea algo de que estamos jugándonosla todo el rato».
Marta Jiménez ha sido la novena persona que ha muerto este año realizando alguna actividad al aire libre en el Alto Aragón y la cuarta víctima que se registra en la provincia desde 2022 practicando esta disciplina. La anterior fue un hombre de 57 años natural de Madrid que falleció en diciembre del año pasado en Peña Telera (Biescas) cuando tuvo un accidente practicando salto base.
Marta Jiménez era la mujer adrenalina de El Hormiguero, pero sobre todo era una mujer a la que le fascinaba superarse a sí misma con retos imposibles al alcance de muy pocas personas. Amaba la vida, la adrenalina, de hay su nombre artístico en el programa de Pablo Motos, el riego y, sobre todo, disfrutar. El día que El Hormiguero la fichó en la temporada 18, Marta Jiménez escribió un post en su cuenta de Instagram que sirve como el mejor ejemplo de lo que la mujer adrenalina era:
«La vida es bella... a parte de ser mi peli favorita, esta frase resume un poco lo que siento hasta hoy. Esto no significa que todo brilla, hay momentos muy duros también, pero os aseguro que las partes bonitas que encogen el corazón son las que más peso tienen. No puedo describir con palabras esta experiencia. ¿Trabajar en la televisión? Al principio parecía casi una broma. ¡Que mundo tan nuevo para mi! Pero la verdad es que soy de decir que sí a las oportunidades porque he aprendido que así en cuando pasan cosas maravillosas. ¡Y tanto! Ha sido una experiencia increíble y un enorme regalo la gente que he conocido en el camino…»
En el mundo del salto base, un mundo lleno de intrépidos que aman volar desde edificios, puentes y acantilados, Marta Jiménez era una de las principales referencias femeninas en España. Según contó ella misma en una entrevista en El Relevo, su amor por este deporte le vino desde pequeña cuando vivía en Torrelodones: «La Pedriza estaba cerca, y una cosa llevó a la otra (…) Poco a poco, comencé a conocer a personas apasionadas por la montaña, no solo en la escalada, sino también en el vuelo, el parapente y el paracaidismo. Fue cuando conocí a mi pareja, Eric de Cima, hace siete años, que empezamos a explorar más en serio la escalada y el alpinismo».
Aunque sus apariciones en El Hormiguero no eran semanales, cada vez que Marta Jiménez estaba en el programa, uno sabía que el final iba a ser apoteósico. Siempre acompañada de su pareja, Marta Jiménez se la jugaba con retos imposibles. Algunas veces, como ella misma reconoció en varias ocasiones, ensayaba una y otra vez hasta que el reto salía perfecto y no había ni un ápice de peligro; otras, directamente, se la jugaba.
Lo mejor de Marta Jiménez no era el reto en sí, pues era más que obvio que iba a ser un gran espectáculo, sino cómo disfrutaba cada uno de ellos. El día que hizo el salto base de 60 metros en el parking exterior de El Hormiguero su primera reacción nada más lograrlo fue reconocer que había sido lo más grande que había hecho hasta el momento. Nunca perdía la sonrisa y siempre parecía que lo que acababa de hacer era fácil, cuando en realidad sólo personas como ella son capaces de hacerlo.
La alegría que desprendía en cada una de sus apariciones televisiva la convirtió en una de las colaboradoras más queridas por el público, pero también por el propio Pablo Motos y el equipo de El Hormiguero, que no sólo volvió a contar con ella para esta última temporada recién terminada, sino que el cariño del presentador era visible en cada reto. Rara era la noche que el primero en abrazar a la mujer adrenalina nada más terminar sus pruebas no fuera Pablo Motos.
Es por ello, que su muerte ha generado una gran conmoción, tanto entre los seguidores del programa como en el equipo de El Hormiguero, que desde que se ha conocido que se trata de Marta Jiménez la fallecida en el accidente de este domingo no ha dejado de recibir en sus redes sociale numerosas condolencias.
Aunque Marta Jiménez saltó a la fama gracias a El Hormiguero, la mujer adrenalina tenía una sólida trayectoria en los deportes extremos. A sus 34 años fundó su empresa, High Jump, cuando estaba estudiando la carrera de Ingeniería Química. En ella se dedican a todo tipo de saltos, desde el más conocido, el puenting; puenting tándem para dos personas; high jump, el más alto de Madrid y el que más caída libre tiene
Con más de 390 saltos base a sus espaldas, fue pionera del rope jump en España y una de las primeras mujeres en practicar paraalpinismo, una disciplina que une alpinismo y vuelo desde cumbres. Para ella, era la combinación perfecta: «Diversión en la subida y en la bajada«.
«Creamos una sensación muy potente cuando lo haces, es brutal. Todo son actividades muy seguras, tenemos todo muy estudiado y, obviamente, no nos la podemos jugar», explicaba Marta Jiménez.
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